Washington, 24 dic (Prensa Latina) Personas con casos confirmados de sarampión pasaron este mes por cinco aeropuertos estadounidenses, donde expusieron a un número indeterminado de viajeros a la enfermedad altamente infecciosa, informó hoy la cadena de televisión ABC News.
En Chicago, el Departamento de Salud da esa urbe dio a conocer que una persona con sarampión estuvo en dos terminales del Aeropuerto Internacional O’Hare en el transcurso de una semana, los días 12 y 17 de diciembre.
De igual modo, una persona con sarampión visitó el Aeropuerto Internacional de Richmond, Virginia, el 17 de diciembre; y otro individuo con un caso diagnosticado de ese padecimiento visitó ese mismo día el área de la puerta de United Airlines en el Aeropuerto Internacional Austin-Bergstrom, de Austin, Texas.
A ello se une que tres niños no vacunados viajaron a un país con un brote de sarampión en curso a principios de diciembre y dieron positivo a la enfermedad cuando regresaron.
Esos menores estuvieron en partes del Aeropuerto Internacional de Denver, Colorado, el 11 de diciembre; y también viajaron en esa jornada a través de las Terminales cuatro y cinco en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, California.
Mark Escott, director médico de Salud Pública de Austin, indicó en un comunicado que el sarampión es una enfermedad viral aguda y altamente contagiosa, por lo que un pequeño número de casos puede producir epidemias rápidamente.
Estas exposiciones a la enfermedad en varios aeropuertos se produjeron al cierre del año con más casos de sarampión reportados en el país en más de dos décadas, un total de mil 276 desde el 1 de enero hasta el 5 de diciembre en 31 de los 50 estados, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
La cifra total de enfermos en 2019 fue superior a los de los cuatro años previos combinados, y más del 75 por ciento de los casos estuvieron relacionados con brotes en Nueva York, la mayoría de ellos entre niños no vacunados en comunidades judías ortodoxas.
A raíz de tales, el país llegó a estar en peligro de perder el estatus de eliminación del sarampión decretado por la Organización Mundial del Comercio en 2000, lo cual logró evitarse cuando a principios de octubre el Departamento de Salud de Nueva York declaró el fin del brote de casi un año en ese estado.